La resiliencia: descubre cómo transformar el dolor en fuerza
La resiliencia nos enseña que en la vida existen situaciones desafiantes a las que generalmente no queremos enfrentarnos, sin embargo, son parte de la misma y por ello es inevitable evadirlas. Lo importante ante estas situaciones es cómo nos afrontamos a ellas y las resolvemos. Ver Productos
El primer paso sería ver esto cómo una oportunidad para aprender, crecer y fortalecernos como personas.
¿QUÉ ES LA RESILIENCIA?
La resiliencia se utiliza actualmente para referirse a la capacidad de una persona para superar la adversidad de forma constructiva, sin embargo, ser resiliente no es simplemente resistir las dificultades, sino que implica un proceso complejo de transformación que requiere tiempo y esfuerzo y que compromete a las personas a tomar una serie de pasos.

Probablemente, este camino esté lleno de obstáculos que afectan nuestro estado emocional, pero también permitirá encontrar nuevas formas de ver las situaciones y afrontar dificultades.
De esta forma, la resiliencia se manifiesta ante la adversidad para superar estas experiencias, aceptando nuestra propia vulnerabilidad y transformándola en fortaleza, convirtiéndonos así en un ser humano más inteligente, valiente y con habilidades para recuperarnos y planificar nuevas metas y formas de vida.
¿CÓMO ES UNA PERSONA RESILIENTE?
Generalmente, todas las personas somos resilientes, puesto que todos nos afrontamos a distintas circunstancias desafiantes que logramos superar, sin embargo, hay quienes se consideran más o menos resilientes debido a experiencias, personalidad e incluso la manera de afrontar las distintas situaciones

La persona resiliente puede tener momentos decadentes, pero es capaz de levantarse y fortalece su autoestima en el esfuerzo. Algunas características que suelen tener las personas resilientes, son las siguientes:
1.-Se conocen a sí mismas y tienen autonomía. Estas personas tienen sus valores y habilidades definidas y cuentan con un criterio propio para decidir lo que es benéfico o perjudicial para ellas, además que suelen tener confianza en sí mismas, por creer en su capacidad de resiliencia.
2.-Actitud positiva. Saber gestionar las emociones es clave para enfrentarse a cualquier obstáculo que se interponga en el camino. Por tanto, la actitud positiva suele ser característica de una persona resiliente.
3.-Afrontan sus problemas. Las personas resilientes no evaden sus problemas, sino que los afrontan intentando buscar la mejor solución, sin victimizarse ni minimizarse.
4.-Aprenden de sus errores. Saben reconocer cuando se han equivocado e intentan reparar sus acciones, actitudes y/o hábitos; además, tienen la capacidad de perdonarse a sí mismas y seguir adelante.
5.-Son flexibles. Reconocen que el cambio es parte de la vida, por lo que en vez de temerle, buscan adaptarse.
6.-Toleran la incertidumbre. No solo no podemos controlar todo lo que ocurre, sino que hay situaciones sobre las que seguro jamás podremos incidir, por lo que lo mejor que podemos hacer es aprender a lidiar con la incertidumbre.
7.-Tienen buen sentido del humor. Toman la vida con ligereza y saben que nada es perfecto, por lo que tienen la capacidad de reírse de sí mismas y sus desventuras.
TIPS PARA DESARROLLAR LA RESILIENCIA
Si no te identificaste con las características mencionadas, no te preocupes, con esfuerzo y constancia podrás desarrollarlas. Algunos tips que te ayudarán a ser más resiliente son los siguientes:
1.-Reconoce tus esfuerzos diarios. Los proyectos y metas se ven afectados ante la adversidad, por ello, reconoce tus logros y esfuerzos y apláudelos, esto te permitirá ver que, a pesar de lo que creas, eres fuerte y lo estás intentando.
Valorar las amistades. El apoyo social es fundamental, por ello, elige rodearte de personas positivas, que saquen lo mejor de ti y con las que disfrutes y aprendas
2.-Desarrolla autoestima. Tener una imagen positiva de quién eres te ayudará a sentir confianza en ti y en tus decisiones. Eres una persona única, con talentos y capacidades que te hacen especial, reconócelo.
4.-Toma decisión y actúa. Evitar o negar un problema únicamente te frenará a desarrollar la resiliencia. Si consideras que no tienes conocimientos suficientes para elegir adecuadamente, puedes consultar a especialistas, pedir consejos, lo importante es que te decidas a actuar
5.-Evita ver las situaciones como insuperables. Recuerda que lo que te está pasando es parte de la vida, más no la vida misma. A pesar de lo intenso que pueda ser, debes saber que no durará por siempre.
6.-Aprende a gestionar y aceptar tus emociones. Todas las emociones nos comunican algo, por ello es importante aprender a identificarlas, sabiendo que es normal sentirlas. Lo que te ayudará a liberarte y a ir generando nuevas emociones que te resulten más agradables.
7.-Buscar soluciones. Centrarse demasiado en los problemas es común para quienes atraviesan momentos difíciles; sin embargo, para mantenerse resistente, es importante ampliar sus horizontes y buscar soluciones.
8.-Sé flexible. La vida es constante cambio, por ello, en vez de pretender controlarla, las personas resilientes procuran adaptarse a cada circunstancia. Si asimilas que lo único que puedes controlar es tu actitud frente a la vida, te liberarás de muchas cargas, molestias y preocupaciones infructíferas.
REFLEXIÓN FINAL
Recuerda que ser resiliente no significa ser invulnerable ni inmune al sufrimiento, sino saber actuar y resolver cada situación.
La resiliencia no se desarrolla de un día a otro, es un camino largo que, como ya se había mencionado, puede estar lleno de obstáculos, sin embargo, con esfuerzo y constancia lograrás desarrollarla.
Finalmente, debes saber que nadie es invulnerable a las adversidades de la vida, y que en ocasiones puedes necesitar apoyo para enfrentar situaciones complejas, si es así, no temas pedir ayuda. Mereces estar y sentirte bien.
REFERENCIAS:
E. (s. f.). Cómo saber si soy una persona resiliente. Ecoembes.